sábado, 21 de enero de 2012

OPINIÓN

JUNTAS LOCALES DE SEGURIDAD CIUDADANA
LEGALIDAD, LEGITIMIDAD Y NECESIDAD

Ante la demanda social de seguridad de hace más de una década, empiezan a surgir las Juntas Locales de Seguridad Ciudadana para auto brindarse seguridad como un paliativo para enfrentar hasta la fecha la creciente delincuencia. Sin embargo el funcionamiento de estas Juntas de Seguridad en la actualidad está siendo cuestionado; a más de una década de su espontáneo pero necesario surgimiento, a pesar de ser una práctica ciudadana arraigada de la prevención de ilícitos y de llenar el vacío de seguridad gubernamental, se está convirtiendo en un esquema a no seguir para auto brindarse seguridad por parte de la ciudadanía, debido a los abusos cometidos por algunos grupos; por contra posición de personas que quieren abolir la imagen de la otrora Ex PAC en la sociedad o de otras que están sacando provecho personal para cometer ilícitos, amparados en organizaciones similares. Para el efecto,  es importante resaltar el motivo del aparecimiento de este modelo, las causas y los efectos en la actualidad, especialmente en la autonomía que estas tienen y en la voluntaria participación de sus integrantes, para que en el futuro su influencia no se pueda revertir en forma negativa, como se ha dado el algunos casos, en donde las mismas comunidades están sufriendo los efectos colaterales de su descontrol. Su legalidad, aunque cuestionable para muchos, por el momento, están llenando las exigencias de seguridad en muchas comunidades del país, han proliferado masivamente y se estima que sumados los integrantes de estas agrupaciones, superan el total de las fuerzas de seguridad, el Ejército y las policías  privadas juntas. Discutible situación para un gobierno que se está estrenando, y como base de su agenda de campaña incluyó el tema de seguridad democrática como uno de los ejes principales para proteger la vida y los bienes de los guatemaltecos.


jueves, 19 de enero de 2012

martes, 10 de enero de 2012

MI CAPITÁN DEL CID SÁNCHEZ

DISYUNTIVA VOCACIONAL?

Aunque él dice ser abogado de profesión y creyente de la familia, creo que Jorge Mario, más bien “Del Cid Sánchez”  tiene una disyuntiva vocacional.  Es juicioso en la toma de decisiones y con grandes perspectivas profesionales, no obstante los recuerdos de la institución armada lo siguen;  y pienso que los tiene a diario. El hecho de retirarse del ejército y ser un profesional exitoso indica que le gustan los retos, que cumple con los objetivos que se propone y que es muy probable que con su carácter llegue a completar las aspiraciones de su vida, que es tener su propio bufete, sin embargo al analizarlo después de muchos años, se aprecia que en sus pensamientos y acciones todavía corre sangre militar.

Puede percibirse que sus fortalezas, además de su familia, son su profesionalización y pro actividad, pero siempre tomando como base de preparación su formación en la Escuela Politécnica, factor que ha sido determinante en su desenvolvimiento social. Dice tener algunas áreas de oportunidad que cree emprender y superar a mediano plazo, entre ellas la falta de confianza en las metas que se propone y que algunas veces no termina por restarle importancia, y no dudo que así lo hará,  por la formación que recibió en esa alma mater. Mi querido Del Cid Sánchez, su dilema es que usted no ha olvidado el chipilín, sigo creyendo que el Soldado no ha salido de su mente, aunque el abogado quiera sacarlo, “Bienvenido al curso de Altos Estudios Estratégicos mi Capitán”